Ética, del griego ἦθος, significó originalmente "residencia, lugar donde se habita".
Preludios de una ética en proceso de oxidación.
Anoche me asaltaron dudas de gran trascendencia: ¿qué altura de tupé, cuánta exigüidad en la falda requiere el régimen de jueves noche? Luego me ha asaltado (1) la
voluntad de saber más, (2) de bromear más agudo, (3) de ser más efectiva impresionando(te) con las destrezas (1) y (2). El problema no son los asaltos de improviso y ser baja en combate: no prever y no estar a la altura de uno mismo. El problema viene cuando el carisma de otros revela las debilidades latentes de uno: saberse de memoria las goteras y limitarse a cruzar los dedos por que no se vean afuera.
Serie de actos de una ética
en suspense.
descuidar el bienestar de otros por recibir atención ingerir refrescos de estandartes de la globalización ser íntegramente consciente de todo de la tierra que está echando sobre
un año de consumo responsable y de la novia de él oírle quitar yerro digo hierro al asunto con subterfugios
como la distancia y la falta de futuro de ambos acertar a recordar momentos
desperdigados como el discurso pausado de una no por prudencia sino por la
dificultad de articular correctamente
Fotografías de una ética
en inanición.
El sujetador
descompuesto, el espejo retrovisor desangulado, la sensación infrecuente de refugio una vez echado
el freno de mano frente a la puerta de casa. Hercúleos esfuerzos como
deslentillarse en lugar de caer redonda en el colchón. La ropa arremolinada en
el suelo y el rímel arremolinado en la almohada. La boca seca. La sensación
punzante de demacre humana.
Epílogo: engalanar la ética demacrada.
La misa del domingo.
Otra posible traducción es "punto de partida". La desvirtuación del término con el concepto de "apariencia" y, por asociación, con "personalidad" (el conjunto aparente, visible, de hábitos constantes del ser) no se produjo hasta la llegada de Aristóteles.
paulasánchez
No hay comentarios:
Publicar un comentario